sábado, 27 de enero de 2007
De rincones montevideanos
Ayer mientras caminaba de visita por Pocitos
unas niñas preciosas me ofrecieron unos collares
que estaban vendiendo.Collares, tarjetas de cumpleaños.
Y para mi sorpresa vendían unos sapitos preciosos, de
muchos, muchos colores. Así que les compré uno, recibiendo
una sonrisa y un gracias de las tres pequeñas.Lo guardé
en mi agenda. Una de ellas me dijo " Le faltan las palabras",
es decir el sapito había que escribirlo.Les sonreí
nuevamente y seguí mi rumbo.
Me encatan esas cosas de Montevideo.
El encuentro relatado me inspiró en esta obra.Se llama
Sapitononsense.
Besotes
Lucía
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario