Hace unos minutos un conocido me largó una frase que me dejó helada.
Me dijo que yo lo trataba como a un niño.
Frente a tal disparate lo interrogué de por qué decía eso.
La respuesta me asombró más aún." Es que vos
contestás todo de manera muy compleja".
Menos mal que estaba bien sentada en el sillón
pero bien esa contestación hubiera ameritado una caída de nalgas si hubiese estado parada.
No tuve más remedio que explicarle que yo era una mujer que quería llegar a ser cultita cuando sea grande, que no aceptaba las tradiciones,las convenciones sin sentido y toda perorata de formalismos a los que hemos estado inmersos desde tiempos inmemoriales. Luego le agregué que era una mujer común y corriente y que pensaba por cuenta propia, criticando aquello con lo que no estaba de acuerdo, emitiendo como a él le molestaba frases complejas y estructuradas.
Yo creo que el muchacho se exasperó por mi larga explicación sobre las causas de mi oposición al matrimonio a su nombre, su significado, su vigencia y a todo lo que implica.
Seguramente su cabeza no tolera tanta sagacidad. ¡Habrasé visto que una mujer emita una frase como esta " No estoy casada, ni pienso hacerlo en mi vida". seguramente la mayoría de los XY pensaría que algo malo te debe de haber pasado para pensar de manera tan radical.
Lucía
jueves, 11 de enero de 2007
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario