jueves, 30 de octubre de 2008

Hoy son 33

Hay un montón de cosas que quiero hacer y aprender. Por momentos se me da por escribir largas listas sólo para realizar el acto, para enumerarlas. Escuchar a este hombre en vivo sería una de las cosas.Esta canción me fascina y como hoy cumplo 33 años me encapriché con poner varias canciones de esas que me encantan. Muchas de ellas no las puedo incluir pues ya las he compartido en los blogs que escribo o comparto con otras personas. 

Hoy me encantaría poder charlar con mi abuelo en valencià. Nunca lo pude escuchar hablar la lengua porque ni siquiera lo conocí. Ni a él ni a otros abuelos que murieron muy jóvenes. Contarle de todo lo que he aprendido en estos dos años, lo contenta que me pone saber tanto y compartir un poco de eso con otro montón de gente que ni conozco. Reirme con amigos que están lejos.Reconocer nuevos sonidos, instrumentos, voces, letras. Que todo sea una constante aventura.Enriquecer el mundo y dejarse enriquecer. Minimizar a los que nada piensan y que consciente o inconscientemente desean que los demás sean cada vez más ignorantes, estúpidos, incapaces de elegir lo que desean. Borrarles la cara y la voz de un plumazo cuando censuran para mantener sus puestos de poder, sus influencias.

Nada nuevo, lo de siempre.

Charlar con J, como siempre. Desde tan lejos y estando tan cerca. Enterarme de los detalles de su ciudad, de sus días. Contarles los de acá.

Seguir maravillandome con Lucía. Cuando ella se muestra creo que todo brilla con otra luz. ¡Qué valiente, maravillosa y talentosa mujer!. ¡Qué poco preparada está la gente para su sensibilidad!.

Vivir con G. Que me siga atomizando ( a veces) con el cine, la música, La novena Puerta, Belle de jour. Seguir compartiendo otra vez películas como el amante. Salir en bici por ahí a recorrer estos nuevos ambientes geográficos. Sentirme orgullosa de sus composiciones musicales, sus ensayos filosóficos, sus teorías.

Ver nuevos animales cada día.¡Cuanta diversidad hay por acá!. Disfrutar de las especies vegetales, de las flores del  ceibo y su sombra. 

Disfrutar del resto de mi familia.Disfrutar de esa sensación de saberse querido.Mostrarles ciertos rincones de la ciudad que nunca han visto.

Extrañar aquel sauce hermoso  y el álamo.

Dejar que Josefina hable y sienta. Regalársela a todo quien la merezca. Dejarla que ella se ponga más políticamente incorrecta que yo.

Volver con Los Malditos Humanos, un comic que me llenó de satisfacciones y placeres.

Comer frutillas con crema. :) Una rica torta de chocolate con café con crema.

Sentarme a escribir por ahí, en algún café. 

Montevideo hoy está un poco nublado pero muy cálido.

Un beso

Ana

lunes, 27 de octubre de 2008

No puede ser

No puede ser que estas cosas sigan sucediendo. Voy caminando esta tarde por el Cordón ( barrio de la ciudad de Montevideo) y veo en una veterinaria ( con una gran vitirina) un gatito chiquitito en una pecera de vidrio. En ella un tarro con comida ( que a primera vista parecía pop, aunque luego no lo comprobé). La pecera decía Gato siamés---tal precio. Me calenté mal.Este pobrecito estaba en un rincón de la pecera intentando lavarse una pata.

Entre al recinto y una persona me interceptó.Le manifesté que iba a quejarme. De que no podían suceder esas cosas.Que un gatito pequeñito no podía estar en una vitrina, en una pecera. Que eso no era el trato que los animales se merecían. La persona me manifestó que lo había colado recién, a lo que yo le manifesté que no yo eso no podía saberlo, que no tenía manera de saber si era verdad o no. Pero que ni los ratones ( cuyos dos acuarios rebosaban roedores) se merecían tal trato. La mujer me manifestó que se ponían allí para promocionar su venta. Peor, le manifesté. No se debería permitir la venta de animales. Ella, me manifestó que nadie se quejaba de esto, a lo que yo le contesté que yo lo estaba haciendo y que esas prácticas debían cesar.

Me fuí super caliente, furiosa, indiganda tanto con quien vende animales como quien los compra. Mucho más de mil pesos salía el gato. Un tráfico que no debería existir. No se puede creer que haya gente que pague esos precios( ningún precio es aceptable) mientras otros gatos son abandonados en las calles, mientras los refugios están llenos de animales que no tienen un hogar.

Esto debe cesar. Yo por cierto me pasaré quejando en esa veterinaria, en todas las que pase sobre estas prácticas dignas de gente sin cerebro alguno.

Un beso

Ana

domingo, 26 de octubre de 2008

Diumenge

Una canción llamada Domingo para un domingo precioso por Montevideo. El ceibo de casa ya tiene sus primeras flores abiertas de lado que recibe más sol. Del otro hay unos tímidos pimpollos. La mamá de mi pareja nos dijo cuando supo que había un ceibo" que no ibamos a tener moscas". Lamentablemente los mosquitos vienen por millones y van varias noches en las que se dificulta dormir. Hace mil años que tengo la postura de no usar agroquímicos debido a que son sustancias muy tóxicas, que además se mata un montón de otros animales y son muy peligrosos para los animales domésticos. Pero era más fácil sostener esa conducta en un apartamento sin jardín que aquí que me rodea el verde. Estoy buscando alternativas más sanas para ahuyentarlos y no matarlos.

La canción es de Sanjosex. La versión que comparto es en vivo en un estudio de Radio Catalunya y el video que está en su página creado especialmente para esta.


Un beso de esos.

Ana






La letra de la canción:

Sento com es mouen les fulles i branques d’aquests arbres,
El soroll de la pluja que cau i del vent que l’acompanya.
Allà lluny veig les llums en filera d’alguna carretera
I a ponent la claror del capvespre darrera les gavarres.

Penso en coses que mai puc pensar perquè no hi ha temps
De res! Avui perdo el temps sense mesura,
Divagant, busco llocs que conec dins el paisatge,
Disfrutant de les últimes hores de sol de la setmana.

I avui
Camino
Aquest camp
Ple d’espígol,
I demà
M’observa
Esperant que
Sucumbeixi,
I no vull... !

Canto mirant l’horitzó amb la vista borrosa,
Voltant, sense fi ni rumb en la mirada
Dispers, penso en tot i en res a la vegada,
I demà seré aixecat aviat de matinada.

I avui
Camino
Aquest camp
Ple d’espígol,
I demà
M’observa
Esperant que
Sucumbeixi,
I no vull... !

I avui
Ui ui ui
I demà
Na na na
Pensaments
De diumenge
Esperant la setmana
Que comença
Que comença demà

domingo, 19 de octubre de 2008

Derretidores musicales

    Hace dos días vengo escuchando Fem l'amor de Sanjosex. Digamos que como unas cuarenta veces hasta ahora. Es una maravilla. Como suena, esas harmónicas ( instrumento que con el cajón peruano y el saxo) me derriten. Lo que dice y como lo dice. Es totalmente adictiva. Ayer  hasta tuve síndrome de abstinencia y todo. Y no es joda. Hacía años que no pasaba eso con un músico y su arte. Podrá gustarme mucho la obra de un montón de gente pero esta sensación no la tenía desde Fernando Delgadillo y Edel Juárez. Además de un extraño impulso creador de varios tipos.

No tengo el audio aún así que dejo el link al myspace de Carles y el vínculo a la letra por si quieren seguir la canción.

Unos  besos de esos desde el oeste de Montevideo, lleno de pájaros que canturrean, el ceibo que le están saliendo sus hojas y el dragón del tronco.

http://www.myspace.com/sanjosex

àlbum: Viva! | Músics: Carles Sanjosé, Toni Molina, Enric àlvarez, Carlos Sanjosé 

Torno a casa, estic cansat. Si algú m’estés esperant...
I aquest pany no es vol obrir. Aquí tot s’està espetllant.
No pot ser estar tant sol, aquí està fallant quelcom.
Ja em començo a posar trist. Ai! si em veiés algun amic!
I a la tele no hi fan res, i el meu llit és massa fred,
la calor m’està matant, els mosquits acribillant.
I és que avui no puc dormir! No sé perquè tant de neguit.
I és que a vegades costa trobar la postura a adoptar.

Si em volguessis escoltar, tot el que t’haig d’explicar,
que no he dit mai a ningú, un secret per mi i per tú.
Prò avans fes-me volar, estirat aquí al meu costat,
que em fas estar tranquil, fem l’amor aquesta nit...

No em preguntis res, no vull. No et preocupis, no vull res.
No m’ho facis explicar, no ho intentis puc picar.
Quan estic allà pensant no hi ha clau per obrir el pany.
I a la tele no hi fan res, i ja ho he dit i no estic sorprès.

Ai la vida quin disbarat! estirat aquí al meu costat.
Avui queda’t a dormir, fem l’amor aquesta nit!
Vine amb mi fes-me volar, estira’t aquí al meu costat,
que em fas estar tranquil, fem l’amor aquesta nit...

Fem l’amor aquesta nit...
Autor: Carles Sanjosé | Any: 1999

sábado, 18 de octubre de 2008

La Bicha de Balazote

¡Hace cuanto no escuchaba esta canción!. Justo hoy que leo en el blog de Nando que El sobrino ya está grabando temas para su nuevo disco. Y que además Juako Malavirgen también lo hace.

Esta canción es un lección de historia casi desconocida para los que vivimos en Uruguay. Me refiero a lo que se enseña en un liceo.

La versión en vivo desde Las Jornadas Setenteras del año 2006. Va con  monólogo del Sobrino incluído. La voz que se escucha hablando es la de Nando Caballero, bajista de la banda. 

Muchos besos. Hoy ha amanecido un día hermoso. No hace casi frío y pinta un día espectacular.

Ana

miércoles, 8 de octubre de 2008

Imagen, Deseo


Imagino que desnudo estás en una habitación en penumbras.Se escucha el rumor de la calle céntrica. Los ómnibus que salen de la terminal cercana. El olor del mar desde la rambla bien próxima. El mar hoy está marrón, revuelto por el viento de la ciudad. Nada de lo que hay afuera importa luego de que he atravesado la puerta y me brindas tu beso en la mejilla. Nada más que tu piel y la corrección forzada que tengo que tener mientras compartimos el ascensor hacia tu apartamento. Luego las sonrisas frente a los vecinos y la entrada a tu casa. Luego tras esa puerta y apoyados en ella empieza lo importante de la noche. Tus manos desnudándome lentamente, tus labios húmedos mordiendo mi piel. La ropa que cae al piso, los zapatos que quedan juntos en dispares discursos al igual que el broche que sostenía mis cabellos negros.

La noche nos abraza y la luna resplandece por la ventana entreabierta. Ahora se escucha un silencio tímido. Las horas han pasado. Me encuentro junto a tí también desnudo como yo. Duermes. Lo haces con una tranquilidad mortuoria y tu pecho me indica lo contrario. Mi cabello se apoya sobre tu pecho. Tu pene permance silente. Lo miro como si con mi mirada pudiera erectarlo. Lo contemplo, lo mido, lo detallo. Lo escaneo como haría un Terminator con su presa.

Tengo unas manos muy inquietas y comienzan a acariciarte.Lo hacen lentamente, parsimoniosamente. Escucho tu respiración fluctuar, variar, cambiar. Te veo despertar voltéandote hacia mí, besándome los pezones suaves. Te siento abrazarme, empujarme hacia tu vientre, ponerme encima tuyo y rozar tu pene ya duro y tibio.

Me tocas con esos dedos largos y suaves. Me recorrés como a una fruta madura y dulce. Me devorás como a un níspero acabado de madurar.

Y entiendo que no imagino sino que vivo este momento.

Lucía Schaffer

Un grapat de petons

Escribiendo en otra lengua se me ocurrió la expresión " un puñado de besos". Me ha gustado mucho y ya la he utilizado para mandar varios puñados de ellos.

Puñados de besos con el calor de esta mano suave y solitaria. Unos besos que contienen el aroma de mis manos luego de tocar lavanda o salvia. Besos con el aire pegado de Montevideo, el sol de la tarde, el olor del mar que a veces se siente incluso lejos de él.

Puñados de besos que discurren por la geografía, los mares, las distancias. Que se multiplican y como si fueran inteligentes toman varios rumbos diferentes. Buscan los amigos que tan lejos están, buscan las bocas de antiguos amantes, reptan hasta la boca de incluso aquellos que nunca conoceré.

lunes, 6 de octubre de 2008

Harry Potter y la Piedra Filosofal- fragmento del primer capítulo-.

El señor Dursley cayó en un sueño intranquilo, pero el gato que estaba sentado en la pared del jardín no mostraba señales de adormecerse.Estaba tan inmóvil como una estatua, con los ojos fijos, sin pestañear, en la esquina e Privet Drive.Apenas tembló cuando se cerró la puerta el coche en la calle de al lado,ni cuando dos lechuzas volaron sobre su cabeza. La verdad es que el gato no se movió hasta la medianoche.
Un hombre apareció en la esquina que el gato habóa estado observando, y lo hizo tan súbita y silenciosamente que se podría pensar que había surgido d la tierra. La cola del gato se agitó y sus ojos se entornaron.
En Privet Drive nunca se había visto un hombre así.Era alto, delgado y muy anciano, a juzgar por su pelo y barba pleteados, tan largos que podría sujetarlos con un cinturón. Llevaba una túnica larga, una capa color púrpura que barría el suelo y botas con tacón alto y hebillas. Sus ojos azules eran claros, brillantes y centellaban detrás de unas gafas de cristales de media luna. Tenía una nariz muy larga y torcida, como si se la hubiera fracturado alguna vez. El nombre de aquel hombre era Albus Dumbledore.
Albus Dumbledore no parecía darse cuenta de que había lleado a una calle en donde todo lo suyo, desde su nombre hasta sus botas, era mal recibido. Estaba muy ocupado revolviendo en su capa, buscando algo, pero pareció darse cuenta de que lo observaban porque, de pronto, miró al gato, que todavía lo contemplaba con fijeza desde la otra punta d la calle. Por alguna razón, ver al gato pareció divertido. Rió entre dientes y murmuró.
-Debería haberlo sabido.
Encontró en su bolsillo interior lo que estaba buscando. Parecía un encendedor de plata. Lo abrió, lo sostuvo alto en el aire y lo encendió. La luz más cercana de la calle se apagó con un leve estallido. Lo encendió otra vez y la siguiente lámpara quedó a oscuras. Doce veces hizo funcionar el Apagador, hasta que las últimas luces que quedaron en toda la calle fueron dos alfileres lejano; los ojos del gato que observaba.Si alguien hubiea mirado por la ventana en aquel momento, aunque fuera la señora Dursley con sus ojo como cuentas, pequeños y brillantes, no habría podido ver lo que sucedía n la calle. Dumbledore volvió a guardar el Apagador dentro de su capa y fue hacia el número 4 de la calle, donde se sentó en la pared, cerca del gato. No lo miró, pero después de un momento le dirigió la palabra.
-Me alegro de verla aquí, profesora MacGonagall.