martes, 16 de enero de 2007

Persistente Necesidad

                                                             Persistente Necesidad                  
                
La necesidad de acción, de acción interna, de movimiento casi sin percepción de los otros. La nada, ese vago vacío al que temen los hombres. Esa lejanía sin árboles, grillos ni espejos. Esa vacuidad aletargada en la esquina del tiempo. Ese espacio que provoca el pavor y los aullidos silenciosos de los que se atreven a respirar el pesado aire que los rodea.

La necesidad de saber de otros, la estúpida necesidad de la certeza. La convicción incierta y falsa. La certeza de que estamos errados aunque creamos que estamos en la precisa verdad.

El viaje en milésimas de segundos a tu piel, al aire que la rodea. Allí donde nada existe, donde aunque me mienta todo es certeza. El golpeteo de las cortinas de plástico contra los ventanales. El olor a mar que persiste. Otra certeza que no es. La uruguaya persistencia de nombrar ciertas cosas con nombres que no son. El olvido del estuario y el establecimiento del mar. Ese mismo mar que nos baña, recupera, enamora así como el olor de tu piel cuando te veo.


28-03-06